"Mi esposa soltó un sollozo ahogado, riendo entre lágrimas. -Mírate, mi dulce angelito. Tan fuerte y terco como tu papá. ¿Qué voy hacer con ustedes dos? Mis hombros temblaron con una risa silenciosa. -Me prometiste 4 bebés más. Julianna me miró fijamente. -Dos. -Cuatro -respondí. Frunció los labios -Tres. -Trato."